Pastor Oscar Sanchez: Feliz día en el Señor nuestro Jesucristo!
Continuamos con:
VELAD.
Rehusemos tener comunión con las obras infructuosas de las tinieblas, sea que estén sobre nuestra propia mente o la mente de otra persona. Re Usemos tener comunión con ellas solo pena de perder el camino. Cuando se está despierto y vigilando, no se llena la mente con cosas que alguien más está haciendo en secreto y a escondidas.
Cuando uno chismea, está teniendo comunión con las tinieblas. Si se continúa en lo mismo, esas tinieblas empiezan a dar fruto en nuestro interior. Uno empieza a sentirse miserable, a perder el deseo de orar, a perder el apetito por la Palabra, A perder el gozo, y se acaba por simplemente querer sentarse y darse por vencido.
No tenemos porque tener comunión con las tinieblas si no queremos. Nos entregamos a aquellos que QUEREMOS.
Una manera segura de caer en un sueño profundo es continuar teniendo comunión con las tinieblas. Esta comunión nos arrulla hasta llevarnos a un sueño tan placentero, que no habrá el menor deseo de ponerse de pie y tener comunión con la luz. Ni siquiera Jesús puede despertarnos si preferimos dormir.
Jesús en el Gethsemaní.
Entonces vino a sus discípulos, y díceles: Dormid ya, y descansad: he aquí ha llegado la hora, y el Hijo del hombre es entregado en manos de pecadores.
MATEO 26:45
En el Huerto de Gethsemaní, Jesús trató tres veces de despertar a Sus discípulos, pero ellos rehusaron a ser despertados. Y llegó el momento que Jesús dijo: «Seguid durmiendo». No estaba hablando solamente del sueño físico, también hablaba del sueño espiritual que se apoderó de ellos desde el Huerto hasta la Cruz. Éste sueño les hizo perder muchas lecciones que pudieron haber aprendido de haberse estado despiertos espiritualmente.
Que el señor Jesucristo nos ayude a Velad, estar despierto espiritualmente.
Dios nos ayude a permanecer despiertos.
Bendiciones en este día para su familia, en su trabajo, y en cada actividad que realice este día.?
(Como guardar tus Vestiduras Espirituales pag. 77 Rev. B. R. Hicks)