PAN DIARIO

Yo anduve errante como oveja extraviada; busca a tu siervo (Salmo 119:176). Cuando regresaba a casa del trabajo, a veces, mi amigo Norm gritaba: «¡Están perdonados!». No era que sus familiares le hubieran hecho daño y necesitaran su perdón. Simplemente, les recordaba que, aunque habían pecado durante el día, la gracia de Dios les garantizaba […]

Leer más